
El juego como herramienta terapéutica: Aprender, explorar y crecer
El juego es más que diversión: es la forma natural de aprender.
Algunos consejos para potenciarlo:
- Deja espacio para el juego libre: No todo tiene que ser estructurado. Dejar que inventen y creen a su manera fomenta la autonomía y la imaginación.
- Sigue sus intereses: Si a tu hijo le encantan los autos o los animales, usa esos temas para motivarlo en nuevos aprendizajes y habilidades.
- Invita al movimiento:Juegos que incluyan saltar, rodar o trepar fortalecen el desarrollo motor y la regulación emocional.
- Integra el juego en la rutina diaria: Hacer la cama, cocinar o poner la mesa pueden ser actividades lúdicas si se presentan de manera divertida.
- Celebra el proceso, no solo el resultado: Lo importante no es que "gane" o "termine", sino que disfrute, explore y aprenda durante el juego.